Desarrollo de las emociones entre 0 y 6 años
- Psicología para Niños
- 9 mar 2017
- 2 Min. de lectura
El desarrollo emocional es un conjunto de conductas que se adquieren conforme a la edad y con quienes interactuas. La etapa de emocional no es fácil de identificar ya que no se sabe a ciencia a cierta cuando empieza o cuando inicia otra.
Lo que sí se sabe es que es durante la edad más temprana cuando se sientan las bases, y que éstas condicionan en una buena medida el resto de aptitudes y habilidades que se tendrán en la etapa adulta.
Dado que las emociones tienen un papel fundamental en la vida, el correcto desarrollo debe potenciarse con sumo cuidado.

Foto de Burstbrisplease
La primera de estas etapas va desde el nacimiento hasta los 6 años, aproximadamente. A su vez, el desarrollo emocional de un niño entre los 0 y los 6 años suele estar fragmentado en tres partes:
Durante los primeros 2 años, el desarrollo afectivo y la confianza en los demás se hace patente. El bebé aprende a jugar e interactuar con el resto de las personas, empieza a reconocer las caras de sus familiares y a identificar a quienes no conoce. Cuando las primeras palabras empiezan a aparecer, se pasa a la siguiente etapa.
A partir de los 2 años se empieza a hablar y a ser consciente de que el cuerpo se puede controlar. En esa etapa puede haber cambios de humor muy rápidos, y hasta puede que parezcan un poco testarudos, pues quieren que las cosas se hagan a su manera. También se apegan mucho a sus papás y sienten miedo a separarse de ellos.
Hasta los 5 o 6 años el desarrollo del niño está centrado sobre todo en el juego. Cuando empiezan su etapa de preescolar aprenden a socializar y a colaborar para conseguir sus objetivos. También empiezan a competir y sentirse bien con sus triunfos o frustrados con sus fracasos. En esa etapa pueden aparecer algunos miedos como el miedo a la oscuridad.
A partir de los 6 años
Para comprender en qué consiste el desarrollo emocional hay que ir más allá de los 6 años, por supuesto, pero los primeros son cruciales para el resto de su vida. Durante los años de escuela se aprende a ser consciente de los errores, así como a expresar de un modo más maduro las emociones. El sentido de privacidad y las capacidades individuales también ocupan una parte de los pensamientos, que comienzan a ser más abstractos.
La adolescencia es la etapa probablemente más convulsa en el desarrollo. Se busca libertad, aunque se sigue dependiendo de los padres. La identidad personal se forja a la vez que se trata de encajar entre su grupo más cercano.
Esta etapa termina aproximadamente a los 16 años. Teóricamente, las habilidades deben estar desarrolladas por completo cuando llega este momento, pero esto no significa que las personas no pueden seguir aprendiendo sobre el manejo de sus emociones ya siendo adultos
Por Psicología para Niños Para Desarrollo y Educación Infantil
Otros artículos que te pueden interesar:
Comentarios